El tema de viajar en el tiempo es muy popular en cine y TV. El sueño es mejorar nuestra realidad regresando algunos años atrás para tomar otras decisiones que HOY consideramos correctas o por lo menos más interesantes que las que tomamos en el pasado. Y entonces entramos en el terreno del “hubiera”.
· Si no hubiera renunciado a la dieta… hoy ya habría bajado esos kilos
· Si hubiera seguido en el gimnasio, hoy tendría el cuerpo que siempre he deseado
· Si hace dos años hubiera ingresado al grupo de inglés, hoy seria bilingüe
“El hubiera no existe, no puedes cambiar el pasado” pues si lo vemos así, es cierto, si vemos hacia atrás y nuestra realidad no nos gusta, ¡pues ya nos amolamos! (o tan educado o prosaico como lo queramos expresar).
A mí me gusta pensar, que el hubiera SI existe, solo está mal ubicado. Hoy es el hubiera de Mañana, todo está en las pequeñas decisiones de cada día.
Por ejemplo, quesadillas, tacos, hamburguesas y tortas NO engordan; como correr, nadar o hacer Pilates NO mejoran la condición física de nadie. No si solo lo haces una vez. Hoy decides que tacos en lugar de ensalada, no te harán más gordo. Dentro de meses será “¡si NO hubiera comido tantos tacos…!”
La escena ideal debería ser “Si NO hubiera venido con regularidad al ejercicio… ¡estaría hecho un gordo(a)!”
Dr. Tony Newman y Dr. Douglas Phillips entran al Túnel del Tiempo.
Para volver el hubiera en algo factible y positivo hoy, puedes usar algunas de estas herramientas:
1. Sabiduría Acelerada. Este es mi favorito pues implica una actitud proactiva al 100%. ¿De qué se trata? Comienza con tus objetivos (si, ya se, ya hable de eso, pero ni hablar, todo está ligado) ¿qué quieres estar haciendo dentro de 5 años? ¿quieres ser el director general de tu empresa? ¿quieres tener tu propia empresa? Cuando tienes esto claro transpórtate en el tiempo y pregúntate “¿Qué necesitaré saber dentro de 5 años? ¿Qué habilidades necesito desarrollar? Tomemos el ejemplo del emprendedor, quieres tener tu propio negocio, tener empleados, tal vez franquiciar una idea, etc. Seguramente para esto tendrás que adquirir conocimientos y habilidades que hoy NO tienes. Si vienes del área comercial necesitaras aprender temas financieros, fiscales, de manejo de personal, etc. Por el contrario si eres un contador o abogado con una idea de negocio, probablemente tendrás que desarrollar habilidades de ventas y manejo de equipos de vendedores.
¿Ya identificaste conocimientos, habilidades o cualquier otra cosa que necesitaras en ese futuro deseado? ¡Perfecto! Ahora vuelves a entrar al túnel del tiempo y te transportas de regreso a hoy, ya sabes lo que dentro de unos años vas a desear haber sabido, tenido o preparado con anticipación… así que lo empiezas HOY. Te inscribes a esa maestría, empiezas a entrenar o lo que sea que hayas identificado.
¡Peligro, Peligro Will Robbinson¡ (una nota aclaratoria). Ten cuidado como manejas este tema de la Sabiduría Acelerada, la idea es que inicies desde ya para que cuando llegue el día estés mejor preparado para lograr tus metas y avances más rápido, no caigas en la trampa de usar esto como pretexto para postergar nada. Todo lo contrario, el espíritu de esta herramienta es acelerar las cosas, y, principalmente, que llegues a ese futuro en mejor forma y no haya lugar a “hubiera”.
2. Dr. Jekyll y Mr. Hyde, la prueba de las personalidades múltiples. Uno de los problemas del “hubiera” es que nadie experimenta en cabeza propia, somos muy necios y nos aferramos a decisión para luego arrepentirnos y cuestionarnos por qué no decidimos diferente. ¿Qué podemos hacer? Antes de tomar una decisión trascendente podemos hacer un ejercicio de cuestionarla y analizarla desde diferentes perspectivas, poniéndonos en los zapatos de diferentes actores, asumir el papel y analizar los efectos de una posible decisión.
¿Qué me diría mi abuelo, mi jefe, mi ídolo?, etc. Puedes hacer el ejercicio mental de preguntar, tratando de usar su perspectiva. No es tan difícil como suena y es sorprendentemente efectivo.
Hay quienes lo llaman “La mesa directiva personal”, si lo hacemos estamos escuchando los consejos que en el futuro nos gustaría haber recibido. Si lo haces tú solo, si te pones en los zapatos de otras personas y analizas tus propias acciones obtendrás diferentes perspectivas.
Por supuesto puedes hacerlo en la vida real, puedes pedir consejo a varias personas, o, mejor aún, buscarte un mentor que te ayude no solo en una decisión en particular si no en un plan de vida. Yo tengo un gran amigo quien es mi mentor en temas profesionales, también tengo una buena amiga quien es mi Sensei digital, y además tengo a mi esposa, quien es mi consejera en temas personales… aunque es un poco como jugar con el árbitro en tu equipo (perdón por la analogía futbolística).
Y obviamente puedes combinar hablar con personas reales con el que tú hagas el ejercicio mental de pensar “¿Qué me diría determinada persona sobre este asunto?”. Lo importante es no ponernos de necios y empecinarnos a una decisión sin analizar opciones y consecuencias.
3. Volver al futuro. Después de hablar, real o imaginariamente, con diferentes personas, tendrás diferentes perspectivas, idealmente muy útiles y reveladoras. Pero ¿y qué piensas tú?, específicamente, ¿Qué pensaras tú dentro de 5 o 10 años? ¿Te imaginas la maravilla que sería regresar en el tiempo, pararte frente a ti mismo y darte unos cuantos consejos?:
· ¡Ahorra!, no gastes tanto en tonterías
· Realmente no necesitamos tantos postres ¿eh?
· Acepta ese trabajo, se lo que te digo, te conviene
· Los beepers si van a ser obsoletos
· Créeme, la gordita del salón se va a poner realmente guapa
Pero, desafortunadamente, eso no creo que vaya a pasar, pero, pensemos que la escena es al revés, tu yo del futuro viene a hablar contigo (¡Rayos! Y tu comiendo hamburguesas con una cerveza) Por supuesto no puedes saber que va a pasar, pero puedes hacer tu mejor esfuerzo por tratar de adelantarte. Si tienes metas claras, sabes lo que necesitas, entonces no es tan difícil. Estoy seguro que si regresaras el tiempo, no tendrías que revelarte los secretos del universo, normalmente mejores decisiones son lógicas, pero requieren de sacrificio. Lo mismo, HOY una meta clara, un plan y fuerza voluntad te pueden preparar para un mejor futuro. Y entonces, el hubiera, realmente no importará.