Hace unos días un amigo me reclamó que en mi blog inicial puse el Plan de Vida como lo primero de mi lista de tópicos a tratar en Garage
Coaching. No me quedó claro si el reclamo fue por un rechazo a mi falta
de orden o por una urgencia personal por tener su plan de vida. Como sea, ANTES
de hacer un plan de vida debemos de tener en claro algunas cosas. Nada
complicado, solo algo así como qué pretendemos en la vida y nimiedades así.
“Elmer J. Fudd, millonario, dueño de una mansión y de un yate”
¿Y tú quién eres? Si hoy conoces a una persona
nueva ¿Cómo te presentas a ti mismo? Para aquellos que tenemos hijos en edad
escolar es muy curioso ver cómo perdemos nuestra identidad dentro del medio de
los colegios y de los padres de familia. Ya no eres Gaby. Eres la mami de
MariJo. Ya no eres Luis. Eres el papá de Luisito Vega de 2do. B.
¿Y tú quién eres?
·
¿Eres la Directora de Finanzas para
la región dentro de tu empresa? - ¿Y si mañana te corren, ya no eres nadie? ¿Si
cambias de empresa, cambias tú?
·
¿Te acaban de promover de gerente a
director de área? ¿significa que ahora eres mejor persona?
·
¿Eres dueño de un restaurante
Argentino de cortes finos de carne? ¿Y en cuaresma que pasa contigo?
Definitivamente nuestras posesiones materiales no
nos deben definir. Tampoco los cargos o títulos.
Como entes urbanos, modernos, tecnológicos, dueños
de tablets y smartphones, día a día jugamos varios roles. Por supuesto, ¡no
podemos ser solo una cosa en esta vida moderna¡, salvo las obligadas
excepciones de la regla: esas personas que hagan lo que hagan solo pueden ser
unos perfectos */%#”s.
Pero dejando esta fauna a un lado, volvamos a ti.
Si, eres directora de finanzas, mamá de Regina, alumna de yoga, chef amateur y corres
medios maratones. Eres todo eso. No eres solo lo que tu título dice, ni solo
como te conocen en alguno de los círculos que frecuentas. Eres todo eso al
mismo tiempo y más.
“Para
servir a Dios, a la Patria y a Usted”.
Si somos tan celosos y orgullosos de todos esos
roles, ¿Por qué cuando hacemos planes de
vida, solo lo hacemos pensando en uno de ellos? ¿Por qué solo pensamos en
el plan de carrera y después todo, en el día a día lo sobrellevamos alrededor
de nuestra actividad profesional?
Si tu plan de vida es trabajar muy duro 10 horas
diarias para llegar a director y ganarte el derecho de trabajar más duro 12
horas diarias, seguro que en el colegio de tu hijo te lo van a reconocer: “El
papá de Lalito nunca viene a ninguna actividad de su hijo”; el espejo te
recordará que tu rol de deportista no está realmente incluido en tu plan de
vida y tu labor de activista estará limitada a seguir la cuenta de Twitter de
tu ONG favorita en tu súper Smartphone.
Porque la verdad, lo que se dice la verdad… todos
planeamos la vida en función del trabajo y asumimos que todo lo demás se verá
beneficiado en consecuencia.
Entonces, hagamos planes que incluyan todas
nuestras facetas. Si no, luego no nos quejemos que no tenemos tiempo o no hemos
logrado alguno de nuestros sueños. El ejercicio puede ser sorprendentemente
sencillo. Intenso, iluminador, inspirador, pero sencillo si lo hacemos con la
diligencia con la que hacemos las cosas del trabajo. Cuando planeamos un
proyecto queremos tener todas las bases cubiertas. Si hacemos lo mismo en
nuestro plan de vida, veremos que es muy similar: varios aspectos
interrelacionados, interdependientes y que debemos de balancear como
malabaristas.
Primero vamos a definir las áreas que queremos
estén incluidas y balanceadas en nuestro plan de vida. Algunos ejemplos muy
comunes son:
Profesional – fácil, obvio ¿no?
Familiar – obvio… ¿lo es?
De pareja – “en lo próspero y en lo adverso”…
yo prefiero en lo próspero
Actividad Física – es como un clásico que no pasa de
moda
Pasatiempos - ¡por favor, por favor, dime que NO
estás pensando en ver Realities por TV¡¡
Por qué te saca de tu realidad para contarte una
historia increíble. !Pues tu plan de
vida debe de ser una historia increíble¡ Resulta que a eso que tenemos debajo de la
gorra, gel, canas, tinte o calvas y que nos ayuda a recordar la contraseña del
smartphone, nuestro cerebro, le encantan las historias. De hecho hay estudios
que demuestran que aprendemos mucho mejor de las historias que de datos fríos y
duros. Cuando el cerebro analiza datos, solo una parte del cerebro se activa
para decodificar los datos. Pero cuando escuchamos una historia se activan
partes del cerebro que se activarían como si lo que escuchamos lo estuviéramos
realmente experimentando.
¿Qué tiene esto que ver con un plan de vida? Bueno,
en mi opinión, es la historia de TÚ vida. Y no te debe solo satisfacer !te debe encantar¡
Como el libreto de una buena película, o como una
novela, tu plan de vida no lo vas a escribir de una sola vez. Primero lo
piensa. Luego borras. Luego le cambias. Luego de agregas. Luego le quitas, le
pones le editas, etc.
Imagina que estas ayudando a un amigo con su plan
de vida: “terminas tus estudios y vas a tener un buen empleo, o pones tu
negocio y no tendrás jefe, serás dueño de tu horario, podrás ir a donde
quieras…” Si al plan de un amigo, le pones sabor y emoción, el tuyo no debería
de ser menos.
Haz de tu plan de vida algo divertido, inspirador,
que te llene de vida.